miércoles, 4 de mayo de 2011

Le Guillotine

Mis modales siempre fueron exquisitos,como corresponde a un verdadero aristócrata,pero con tanta gente abucheando y gritando mi nombre,al final perdí la cabeza.

1 comentario:

  1. Yo más bien diría que hacía perder la cabeza a todos los que le acercaban.
    Saludos, y un abrazo.

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